LUTECIA
(16-06-1991)
Quema la ciudad iluminada,
Lutecia,
le ordenaron
que arda la piedra y la memoria pura de
occidente.
Condenada a la pira
pero no obedeció,
El hombre de Gris
no pudo,
quemar la luz,
la torre
el aire que deslumbró su raza.
NIÑOS
DE GUERRA
(1999)
Los niños de la guerra
se entrelazan
entre las raíces de los subterráneos
se llueven de pena
se nievan
crecen
antes de romperse a pedazos
se hacen viejos antes de existir
aprenden de memoria
el olor del cansancio
sólo miran
les aturde una música lejana
cierran los ojos de sus muertos
como hombres
los
despiden
no dicen
una sola
palabra.
CONJURO
Media noche
embriagados forcemos el destino
acunando a los viejos amigos
apremiados
a la entrada del laberinto.
marcados a girones
en nombre
del poder absoluto
EL
VAHOR
Cierto que sólo somos
carne y huesos de animal aniquilado
cierto que sólo el hedor nos recuerda
lo terrible de la mortalidad
pero el instante preciso
que torna al hombre en asesino
es el brazo en alto
en auxilio
la mano desarmada
la mirada abierta del otro
sometido a traición
y ejecutado.
EL
ARCA
Vino en la sangre
salpicando desde las estrellas
terrible y volátil
a través del viento y las mareas
en el insomnio de los hombres
en sus ojos febriles
en su esperma.
vino genérica la madre
fusionada en la espada
con sus miedos
sus susurros
y sus clausulas.
vino todo a nosotros
en la Cruz sostenida
en sus Edictos.
La zozobra
el ejecutor
y la palabra.
Emilia Toro Leontic, poeta, medico, participó en Colectivo de escritores jóvenes de la SECH y en la Casa de Cultura del Colegio Médico, su trabajo poético se encuentra reunido en tres libros editados “Voces subterráneas 1978-1983”, “A ojos cerrados 1988” y "Territorios secretos 1992”. Otros trabajos en revistas y Antologías.
1 comentario:
Que descubrimiento la poesía de Emilia Toro Leontic.Buscaré sus libros.
Adriana Goñi
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