"La poesía se toma la palabra en una ciudad donde las balas han reemplazado las palabras y el amor es sexo más billete.” Orietta Lozano, gana la competencia del mejor verso erótico del Valle del Cauca.
La noche del jueves 4 de noviembre de 1993 estuvo fría y mojada, pero dentro del Coliseo Evangelista Mora donde María Mercedes Carranza y José Mario Arbelaez esperaban la noche todo era un cálido silencio en una ciudad acostumbrada a los triunfos de La Mechita, hoy víctima de la maldición de Garabato. Afuera dos larguísimas colas son la respuesta de los caleños a la convocatoria de Casa de Poesía Silva, Proartes y la Universidad del Valle a esta cuarta celebración de La Poesía tiene la Palabra. Sin duda muchos de ellos no podrán ingresar al recinto, que está como una colmena, miles de gentes que desean un alivio entre la miseria, el desempleo, la violencia y que la poesía [gratuita] ha de procurarles como tabla de sosiego o de salvación.
De repente María Mercedes, que es ella toda poesía y ha encendido esta llama en Cartagena, Medellin y Bogotá, ataviada con un traje negro de strapless, entallado con un inmenso moño del mismo satín alejandrino de que está hecho y que contrasta con los gladiolos rojos del proscenio, pide silencio y dice que el país se ha olvidado de usar las palabras y las ha remplazado por las balas. La gente aplaude a rabiar mientras gritan Viva Oscar de la Renta y por un momento los rumores, los murmullos, el bullicio cesa, calla el poeta secreto, el bacán, la soñadora, el que llegó de chiripa o ese poetilla de barba y cola de caballo que vende sus minúsculos libros de poemas y unas hojitas de mimeógrafo. Carranza propone que la poesía sea incorporada a la canasta familiar, pide más silencio, más carácter, dice que estamos aquí para afirmar e imponer la presencia de la vida rechazar la connivencia con la combinación de todas las formas de lucha.
Pero la gente quiere es poesía, no quiere discursos, en eso insiste suavemente Amparo Sinisterra de Carvajal que sube al escenario y pregunta dónde están los poetas y ellos suben y se sientan presidiendo un sesión solemne.
Poco a poco los versos leídos por los poetas, los textos cantados por el Coro de la Universidad del Valle, con la presencia de su Rector Magnífico el Doctor Jaime Galarza Sanclemente y las palabras de los profesores Guliano Malatesta y Dario Henao, en nombre de los organizadores del evento, son recibidos con aplausos de 70 mil caleños, muchos de ellos de vario pinto colorido.
Sin embargo el gran sorprendido fue el Gobernador Carlos Holguín Sardi, quien después de escuchar la carta firmada por 350 mil vallecaucanos, a través de la cual pedían la construcción de una Casa de la Poesía para el departamento, vio cerca de 3 mil velitas encendidas por los asistentes que se unían a esta petición.
Juan Manuel Roca, director-propietario del Magazín Dominical de El Espectador y mano izquierda de María Mercedes Carranza él siempre actúa con un telón de fondo donde resuenan las noches de la Edad Media y la música de los barcos de locos del Danubio, recordando el terror que viven los secuestrados por las bandas insurgentes que comanda en la región el llamado “poeta del terror” Pablo Catatumbo, zarandeó al público con Los cuervos del placer:
Volver a visitar tu más mojado distrito
en los períodos menos ex profeso
mientras separas de par en par
los belfos de la página en alba de tus ancas,
y tú ajonjolí que guarda el rojo fruto
se ajusta a mi galope de potrillo antioqueño
en una plaza de bovinos repleta de odres.
Volver a reanudar la fatiga
entre la leche derramada del cre-pús-culo.
Al filo de las diez, después que el infaltable uruguayo Rafael Cortesías, o el habanero que mejor recibe los fines de semana al comandante Fidel Castro en su casa de El Vedado, Pablo Armando Fernández, junto a su compatriota Efraín Rodríguez Santana, y el boliviano español, alto funcionario de Cultura Hispánica Pedro Shimose leyeran sus versos en medio de una lluvia de aplausos, se dio a conocer el fallo por votación popular nacional que escogió el mejor poema erótico de nuestro tiempo. Se sabe que una legión de amigos del gran poeta Roca y Malatesta hicieron proselitismo desde sus medios para que los colombianos votaran democráticamente esta vez, como lo habían hecho antes con el Gerente del Banco de la República Don Dario Jaramillo Agudelo y sus poemas de amor.
Jaime Jaramillo Escobar cerró el recital. El gran poeta más delgado que un espagueti se sitúa en el centro del escenario y despliega un extenso rollo donde vienen los poemas. Brilla con su expresión entre alelada y diabólica. Pero es tierno. Su verso invoca la sonrisa. Desgraciadamente el poema es muy largo y aburre a la gente, el poeta no se detiene a tiempo y lee bajo el asedio del público, que comienza a abandonar el Gimnasio y obliga a Jaime a terminar abruptamente.
Mi negra se emperejila, se emperespeja, se aliña,
Con alhucema y albahaca, con cedrón y toronjil,
Con lavanda, con canela, con loción y con anís.
Mi negra tiene un meneo que no cabe por la calle,
Mueve el tacón y la punta del zapato y ese baile
Derrama tantas fragancias que no caben en el aire.
Mi negra es alta y esbelta, muy lucida y bien plantada,
Su cuello es tan largo que anda su cabeza por el aire.
El donaire de mi negra no cabe en ninguna parte.
Mi negra tiene ojos blancos, dientes blancos, calzones blancos,
Calzones en diminutivo, calzoncitos, prendas íntimas…
Para la lectura del fallo, el Gimnasio ha perdido mucho público. Las tribunas altas están casi vacías. Hay mucho movimiento de personal. Pero fue maravilloso reunir a tanta gente en torno a la palabra, aunque ahora se vayan como alondras.
El primer puesto fue para el poema La amante, de Orietta Lozano, con 63.520 votos; el segundo lo obtuvo una creación de Carlos Arturo Hoyos, y tercero resultó elegida una pieza poética de José Mario Arbeláez titulada Mi pasión por la Maga Atlanta que permanece inédita porque será publicada en Caracas cuando gane el Premio Chino, según anunció esa misma noche la doctora Lucia Mery Giralda.
También se otorgó el premio al mejor verso erótico de autor fallecido a Miguel Rash Isla.
Aunque el fallo fue recibido bien por la mayoría de los asistentes, el poeta Carlos Arturo Hoyos ha entablado una demanda frente al resultado de la votación. El pide que se recuenten los votos, ya que no lo convence el veredicto.
Orietta Lozano nació en Cali pero es muy conocida en Bogotá. Su poema La amante, dice así:
Soy ella, la eterna,
la antigua, la nueva,
la de siempre
la que se cierra
la que se abre
la de ambivalentes tardes.
Soy la que renace,
la que se abre
la que se cierra.
Por su parte, el verso ganador de Miguel Rasch Isla, dice:
En la grata penumbra de la alcoba
todo, indecisamente sumergido
y ella, desmelenada en el mullido
y perfumado lecho de caoba;
tembló mi carne enfebrecida y loba,
y arróbeme a su cuerpo repulido
como un jazminero florecido
una alimaña pérfida se arroba;
besé con beso deleitoso y sabio
su palpitante desnudez de luna
y en insaciada exploración, mi labio
bajo al umbroso edén de los edenes
mientras sus piernas me formaban una
corona de impudor sobre las sienes....
Esa noche de poesía erótica fue algo sensacional.
PUBLICADO EN EL PERIÓDICO El Espectador,
Bogotá, Noviembre 6 de 1993.
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